¿Qué pasa si no descalcifico mi cafetera?
Si quieres alargar la vida de tu cafetera doméstica y mantener el sabor del café como el primer día, es necesario saber cómo limpiarla de manera cómoda y segura


Las cafeteras domésticas son un electrodoméstico básico y muy usual en cualquier cocina. Sin embargo, es uno de los rios que más cal acumula. Buena culpa la tiene el agua que usamos: esta va deteriorando los conductos internos y mermando su eficiencia. Para evitar esto, es imprescindible saber cómo descalcificar una cafetera y cómo limpiarla de manera integral. Para ello, en EL PAÍS Escaparate os daremos una serie de indicaciones claras y precisas para tener éxito.
¿Cada cuánto tiempo se debe limpiar una cafetera?
Como en toda limpieza que se precie, las cafeteras son máquinas que almacenan numerosos residuos a raíz de las sustancias a las que se ven expuestas: como la mineralización del agua y los residuos o posos del café. Sobre todo, a nivel interno, donde la cal, el moho y otros gentes externos comprometen en mayor medida su buen funcionamiento.
La cafetera doméstica se debe limpiar, como mínimo, una vez al mes. Es algo que no conlleva un esfuerzo extra, sobre todo, si tenemos los productos adecuados. Cada tipo de cafetera es diferente pero, en esencia, el proceso de limpieza suele ser el mismo en todos los casos. Para ello, nos apoyaremos en sitios especializados, como la web de la OCU, para detallaros cada proceso:
Productos caseros para descalcificar una cafetera
Entre los que imagináis, no puede faltar el bicarbonato de sodio, el vinagre de limpieza o el jugo de limón. Eso sí, en el caso del vinagre hay que tomar precauciones, ya que si nos excedemos en su uso, se podría provocar la corrosión de algunos de sus elementos diseñados en aluminio, además de dejar un poso a vinagre que afectaría a la calidad de los preparados.

Bicarbonato de sodio (1,43 kg)
