La subida de los precios agrava las dificultades para asistir a colonias de verano

La llegada del verano representa una preocupación adicional para ciertas familias barcelonesas, especialmente para las monoparentales acompañadas por servicios sociales y que se encuentran en una situación de pobreza, según el informe presentado por la Fundación Pere Tarrés, que analiza la situación socioeconómica de los niños que asisten a sus colonias de verano a través de una beca. El centro ha hecho público este jueves que el 66,9% de los hogares becados se encuentra por debajo del umbral de pobreza y un 46,9%, en situación de pobreza severa. En el caso de la pobreza extrema, son una de cada cinco familias (un 20%) las becadas. La fundación espera otorgar este año 7.000 becas para niños que, por la situación económica de sus padres, no tendrían oportunidad de participar en actividades lúdicas durante el verano.

El análisis presentado en el centro de la Fundación en el barrio de Poblenou ha puesto en evidencia que la situación económica de las familias becadas empeora cada año. En cuanto a la pobreza severa, los datos representan un crecimiento de 9 puntos respecto a los presentados en el informe del pasado año, mientras que en el caso de pobreza extrema también se observa un aumento de 5 puntos. “Los gastos de las familias no han hecho más que crecer en los últimos años, con lo que incluso las familias que quedan por encima de estos índices se encuentran en situaciones muy precarias”, han explicado desde la Fundación.

Para Salomé, una madre becada por la Fundación Pere Tarrés, este será el tercer año consecutivo que su hijo asiste a las colonias de verano del centro. “Tengo horarios complicados en el trabajo y sin la beca no podría cubrir el costo de las colonias”, explica. A lo largo de estos tres años su hijo ha visitado el parque de atracciones del Tibidabo y diferentes playas. “Él lo disfruta mucho y a mí me ayuda bastante porque recibe alimentación y participa de las actividades”, asegura. El centro destinó el verano pasado más de dos millones de euros a becas para que niños como el hijo de Salomé puedan participar de las colonias de verano y las actividades semanales.

“Los niños comparten mucho, los llevan fuera de Barcelona, disfrutan del verano y he notado que a mis hijos les aporta mucha autonomía”, cuenta Brenda, otra madre beneficiaria de las becas del centro. Pere Tarrés se ha dedicado en gran parte a promocionar actividades que fomenten el ocio educativo en la infancia, adolescencia y en el seno de las familias. “Todo lo que acontece fuera del aula tiene un papel cada vez más relevante, que todos estos niños no puedan participar en actividades de ocio supone educativamente como si perdieran dos años de escolarización”, ha asegurado el director adjunto de la Fundación, Rafael Ruiz, durante la rueda de prensa.

El año pasado, el centro consiguió becar a 6.734 niños gracias a donaciones de entidades privadas y públicas. “Queremos que el verano para estos niños no esté vacío, que no se queden un nuevo verano en blanco, que puedan llenar sus bolsillos de experiencias”, ha concluido Ruiz.