Pasta rápida con tomatitos y garbanzos
Un bote de garbanzos cocidos, unos tomates cherry, ajo, aceite de oliva y, si tienes, albahaca fresca: en 30 minutos y solo con estos ingredientes puedes montar un platazo bien completo y sabroso
¿Hay un límite a la combinación pasta y legumbres? Es posible, pero aún no lo hemos encontrado. La receta de hoy tiene una relación esfuerzo/felicidad óptima: la salsa se prepara mientras cuece la pasta, y al final conseguimos un plato único, completo y sabroso. Suena a SEO para Google, pero es que es así. Punto a favor añadido: los ingredientes son fáciles de tener a mano, exceptuando quizá la albahaca fresca, pero si no la tienes no es grave. Un bote de garbanzos cocidos, unos tomates cherry, ajo y aceite de oliva, no necesitas nada más.
Los garbanzos triturados ayudan a crear la sensación salsosa -término altamente técnico-, recubriendo la pasta y ayudando a que todos los sabores se mezclen. Los tomates cherry aportan umami y dulzor, haciendo que cada bocado tenga matices distintos y que el plato no resulte aburrido. Para terminar de cantar las maravillas de esta receta, te diré que también funciona bien para táper: solo tendrás que tener cuidado de dejar la pasta un poco más al dente que de costumbre.
Tiempo: 30 minutos
Dificultad: Apretar el botón de la batidora es una hazaña
Ingredientes
Para 2 personas
- 200 g de tomate cherry
- 200 g de pasta corta
- 200 g de garbanzos cocidos
- Aceite de oliva virgen extra
- 1 diente de ajo
- Cayena en copos (opcional)
- Unas hojas de albahaca fresca (opcional)
- Sal
- Pimienta negra recién molida
Instrucciones
Poner a hervir una olla con agua para la pasta. Cuando hierva, salar y poner a cocer la pasta.
Mientras, en una sartén, calentar dos cucharadas de aceite de oliva, añadir el ajo en láminas, una pizca de cayena si se usa y los tomates cherry cortados a la mitad. Sofreír a fuego fuerte un par de minutos y apagar.
Triturar la mitad de los garbanzos con unas hojas de albahaca y una cucharada de agua de la pasta si es necesario.
Volver a encender el fuego debajo de los tomates, añadir los garbanzos triturados y los que quedaron enteros.
Escurrir la pasta al dente, añadirla a la sartén y saltear un minuto para que se mezclen bien todos los ingredientes.
Servir con una vuelta de buen aceite de oliva y un poco de pimienta negra molida.
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