Guía de perchas: de madera o de terciopelo, ¿para qué sirve cada una?
No hace falta ser el duque de Windsor (que tenía una percha a medida para cada prenda) para descubrir cómo la elección de este rio sin importancia puede hacer que tengas un armario más ordenado y una ropa que dure más


Hay perchas de madera por dos euros (las encontrarás en Ikea, Zara Home e infinidad de tiendas de artículos para el hogar) y perchas elaboradas a medida en nogal, tapizadas en terciopelo o con detalles metálicos grabados a mano para firmas como Chanel, Hermès o Louis Vuitton que cuestan más de 300 (es el caso del fabricante francés Butch). Existen, también, perchas convertidas en objetos de culto (como las que exhibieron la colección Artisanal de Maison Martin Margiela en 1997), e incluso hay una considerada “la Rolls Royce de las perchas”: la Nakata Hanger, hecha de madera de haya europea, a mano y en Japón por un ebanista, que puede llegar a superar los 1.200 euros.
Esta variedad aporta dimensión a un objeto que en apariencia es meramente funcional, pero también ilustra que todo rio, por insignificante que parezca, es susceptible de buscar la perfección. He aquí una guía práctica sobre tipos de perchas para saber utilizarlas como un experto.
1. Perchas de madera
Uso: Chaquetas, abrigos, trajes, prendas pesadas.
Por qué: Son resistentes y mantienen la forma de prendas estructuradas.
Dato curioso: Las perchas de madera de cedro rojo natural repelen polillas y dejan un aroma elegante en la ropa.
2. Perchas acolchadas
Uso: Vestidos de seda, lencería, prendas delicadas. Por qué: Evitan que se marquen los hombros y protegen los tejidos suaves. Dato curioso: Eran un clásico de los tocadores de las estrellas de Hollywood en los años 40, siempre forradas en satén.